Conocer el comportamiento de los usuarios e incorporar esa información a la estructura de la página es imprescindible para que un proyecto web sea exitoso a largo plazo.

Con frecuencia, disponer de un sitio web no es suficiente para atrer a los visitantes. El promedio de los internautas tarda de 10 a 20 segundos en visitar un sitio web común, un lapso de tiempo crucial para captar la atención de los usuarios y conseguir que continúen interesados en la página.

Las primeras impresiones y la navegación del sitio representan las principales causas que podrían llevar a tus visitantes/clientes potenciales a abandonar tu sitio web. Con el tiempo, cualquier página necesita ponerse al día, actualizar su diseño y reorganizar su estructura para recuperar su atractivo y garantizar la calidad de experiencia de los usuarios (QoE) sin dejar por ello de ser reconocible y conservando sus valores y personalidad.

Tener una web es imprescindible para estar presente en el mercado y que el público pueda buscarte y encontrarte a través de buscadores como Google. Sinembargo, algunas empresas le dan muchísima importancia a la creación de su página web pero descuidan por completo la calidad de dicha web u olvidan enseguida la inportancia del mantenimiento y la actualización.

Actualizar tu sitio a menudo y cambiar su estilo de vez en cuando es algo necesario para tu negocio, no sólo para que los usuarios en general y tus clientes en particular vean que hay movimiento en tu empresa, también para que los buscadores lo tengan en cuenta a la hora de posicionar la web.


Un restyling puede ser un cambio radical… o no

Un restyling web no es otra cosa que un rediseño y una renovación de los contenidos web con el objeto de mejorar tu imagen online de cara a tus usuarios y clientes potenciales. Se trata fundamentalmente de actualizar nuestra web, adaptándola a las nuevas tendencias de diseño y tecnologías, además de renovar los contenidos, manteniendo la base de lo que se quiere comunciar.

Llevar a cabo el restyling de una web no es solo una cuestión de diseño gráfico. Para que la transformación sea un éxito, debemos realizar un estudio de las funcionalidades existentes y los aspectos a mejorar, definir nuestros objetivos y trazar un camino a seguir para cambiar los elementos que la conforman en su aspecto visual manteniendo la coherencia con el resto del material corporativo.  La renovación puede comprender, por lo tanto, diferentes aspectos: un cambio de la plantilla, nuevas fotos, redistribución de los contenidos o incluso nuevas funcionalidades.

En Area digital, somos especialistas en poner al día webs que han perdido la «chispa». Si su web está obsoleta, tiene un diseño desfasado, no está optimizada para buscadores, o simplemente siente que necesita un cambio,  no dude en contactarnos.